‘Hey Jude’, la cancion de The Beatles que se convirtió en más que un himno

Corría el año 1968 cuando la noticia de la separacion de John Lennon y Cynthia Powell llegó a oídos de todo el mundo, pero quién más lo resentía en ese momento era el hijo del matrimonio, Julian Lennon.
Julian y Paul eran dos personas muy unidas, incluso se llegó a decir que McCartney era más una figura paterna para Julian que le mismo John. McCartney al ver la situación por la que Julian pasaba en ese momento se inspiró a hacer una canción que motivara al pequeño Julian de aquellos años.
En una entrevista, el músico británico contó:
Llevaba cerca de una hora conduciendo. Entonces, apagué la radio e intenté componer una melodía. En ese momento, empecé a cantar: Hey Jules, no lo estropees, coge una canción triste y mejórala… Tenía un mensaje optimista y esperanzador para Julian: Vamos, chico, tus padres se divorcian. Sé que no eres feliz, pero estarás bien.
La canción llevaba por nombre “Hey Jules, pero después McCartey la modificó.
La melodía dura siete minutos y once segundos, lo que la convirtió en una de las canciones más largas de la historia hasta ese año y está considerada como una de las 500 mejores canciones de todos los tiempos según la revista ‘Rolling Stone’ y una de las mejores canciones de la historia.
La orquesta que participó en la grabación estaba compuesta por 36 piezas: 10 violines, 3 violas, 3 violonchelos, 2 contrabajos, 2 flautas, 2 clarinetes, 1 clarinete bajo, 1 fagot, 1 contrafagot, 4 trompetas, 2 trompas, 4 trombones y percusión.
No fue hasta veinte años más tarde que Julian Lennon descubrió que Paul se la había escrito a él.
